Un comercio ubicado en 9 de Julio y Sargento Cabral de fue víctima de un robo durante la madrugada de este lunes, entre las 5:00 y las 6:30 horas, según relató Anibal uno de sus dueños. Los delincuentes ingresaron al local rompiendo el vidrio frontal, ingresando «agachados y bien pegados al vidrio» para evitar ser detectados por las alarmas, las cuales estaban activadas pero no se dispararon.
El propietario detalló que los ladrones se dirigieron directamente a la caja registradora, de la cual sustrajeron únicamente el dinero destinado al cambio (incluyendo billetes de 100 y 500 pesos). Precisó que el monto robado «no era mucho» –fondos reservados para pagar al panadero matutino– y enfatizó que nunca dejan grandes sumas de efectivo en el local.
La pérdida más significativa fue la rotura del vidrio, cuyo costo de reposición calificó como una «fortuna». Este incidente constituye la tercera ocasión en que el local sufre un robo con el mismo modus operandi.
Actualmente se encuentran revisando las grabaciones de las cámaras de seguridad exteriores para determinar la hora exacta del hecho, y ya se tomaron fotografías de los daños para presentar al seguro. «El mayor dolor es el vidrio, la plata no era mucho«, concluyó el comerciante.
Preocupación en el barrio por los robos
Los incidentes incluyeron un asalto a una vivienda, el robo a un verdulero local y el hurto de materiales en una obra en construcción.
Según testimonios recopilados, el pasado sábado delincuentes ingresaron a una vivienda mediante escalamiento («segundos pisos»), sustrayendo una bicicleta y otros objetos personales. Paralelamente, el mismo fin de semana atacaron al verdulero ubicado en la esquina del barrio, aunque aún se desconocen los detalles específicos de lo sustraído. Además, los ladrones robaron caños y posiblemente herramientas de una obra contigua a la vivienda afectada, lo que sugiere un patrón delictivo coordinado.
«No es solo por lo que me robaron, sino por el daño y la actitud: como si nada. Vienen, rompen, entran y se van«, expresó un vecino víctima de los hechos. Los testimonios coinciden en que los delincuentes operaron con rapidez y total impunidad.
La situación se agrava por al menos otros casos previos reportados en la zona, donde varios vecinos y comerciantes habrían sido blanco de robos recientes.
