San Lorenzo y la región no dejan de hablar del frío que se ha instalado con toda su inclemencia. Sí, claro que es natural que haga frío en invierno, pero las bajísimas temperaturas (- 5° 3, la mínima de ayer, martes, por la mañana) sorprendieron a más de cuatro.
Pero parece que para alguna gente, altruista, generosa, «sorpresa con sorpresa se paga», si es que cabe reformular la frase. Esa gente pertenece al Club de Leones San Lorenzo y en la mañana de ayer generaron su propia chance de sorprender – gratamente, en su caso – a otra gente que, por distintos grados de necesidad, debía estar, muy temprano, fuera de su hogar. ¿Cómo concretaron esa sorpresa? Convidando café, café con leche y mate cocido con leche. Así, como si fuera lo más natural del mundo (que desafortunadamente, no lo es).
«La concreción de esta iniciativa de ‘Las chicas’ del Club nos tomó casi de sorpresa, tanto como el frío», dice la doctora Stella Stewart, expresidenta y actual asesora legal del club y vicegobernadora primera del distrito 2, uno de los cinco distritos en que se agrupan los clubes de Leones en nuestro país y que abarca a las provincias del litoral. Y «Las Chicas» son el grupo de jóvenes del club y quienes, munidas de termos, salieron a convidar con las infusiones. «Puntualmente, la idea fue de Analía Colombari, quien será la próxima presidenta, ya que el 30 de junio terminó el mandato de Liliana Nóbile», cuenta Stella.
«Las Chicas» se ocuparon de preparar las infusiones en sus respectivos hogares, de pasar a buscar los termos por la sede del club (Moreno 581) y de emprender la recorrida, que incluyó lugares como el Hospital Granaderos a Caballo, la Esquina de los Bancos y el Juzgado de Familia, y durante la cual invitaron a pacientes del hospital, empleados, miembros de Prefectura, vendedores ambulantes y personas en situación de calle. «Fue una idea muy linda, que nos llena de orgullo. Queríamos hacer algo más, porque con la donación de ropa no alcanza», sostiene la abogada.
Este jueves y este viernes, la acción se repetirá. «Esperamos ser más las que nos pongamos los chalecos identificatorios del club y salgamos a la calle», comenta Stella. «El único inconveniente es que nuestras respectivas ocupaciones, a veces, nos restan posibilidades», explica la León, que también repasó que recientemente, el club donó ropa de trabajo y de bebé. «Y aún tenemos la idea, que germinó hace un años, de conseguir acercar una bandeja de comida caliente a las personas en situación de calle«, concluyó.
