
El senador Armando Traferri pidió la urgente conformación de una mesa de diálogo y cuestionó al gobierno provincial por su falta de intervención ante el cierre temporario de las plantas de Vicentin
El senador del departamento San Lorenzo, Armando Traferri, manifestó su “profunda preocupación” por el cierre temporario de las plantas de la agroexportadora Vicentin en Avellaneda y Ricardone, y exigió al gobernador Maximiliano Pullaro que no «les suelte la mano a los trabajadores”.
La empresa, una de las más emblemáticas del sector agroindustrial argentino, suspendió sus operaciones alegando falta de contratos de fazón, una modalidad que permite procesar granos para terceros. Según comunicaron desde el directorio, la decisión busca “proteger los activos” de la firma, en medio de una reestructuración judicial estancada por causas legales que aún no se resuelven.
“Sabemos, hace tiempo, que la situación es grave. No podemos dejar solos a los trabajadores discutiendo este problema”, sostuvo Traferri, y pidió la conformación de una mesa de diálogo con sindicatos, intendentes, concejales y legisladores, con participación activa del gobierno provincial.
El legislador advirtió que lo que ocurre en Vicentin se enmarca en una tendencia preocupante en el Cordón Industrial santafesino. “Ya pasó con los serenos de buque; lo intentaron con los trabajadores de Sutracovi y con los de la UOCRA. No se respetan los convenios colectivos y la variable de ajuste siempre son los trabajadores”, denunció.
Traferri también recordó el antecedente del cierre de la planta de Dow, como un ejemplo del costo de la inacción estatal. “No sólo se perdieron 120 empleos directos, sino más de 3.000 en toda la provincia”, señaló.
“La provincia no puede mirar para otro lado. El Estado tiene que dejar en claro si está del lado de los trabajadores o de las empresas”, sentenció el senador.