
La Asociación Civil Alianza Femenina, cristalización de un proyecto de pocas personas que hoy beneficia a muchas, fue presentada oficialmente por sus responsables ante el intendente, Leonardo Raimundo, quien los recibió en el palacio municipal junto al concejal Gustavo Oggero y a la doctora Luciana Resquín.
El establecimiento de la institución, en la que más de 60 chicas juegan al fútbol en la Liga Sanlorencina, es el corolario de un trabajo que nació hace una década «gracias a la inseguridad», según la paradoja que expresa Enrique Chierici, presidente de la vecinal de barrio Mitre y mentor del proyecto.
«Trabajo desde chico, al servicio de la gente, sin estar en ningún partido político. Somos cuatro o cinco y tenemos muchas cosas hechas», describe Enrique, y ubica su narración en el inicio: «En este caso, en 2014 ó 2015, comenzamos intentando que los lotes sin edificar que había no fueran usurpados y que se erradicara la mentira de que eran terrenos fiscales, sin dueño». Al cabo, «para que los propietarios no perdieran su bien y que las cosas funcionaran». Pero sin tener dinero, ¿cómo podían hacer que funcionara? «Dialogando para hacer acuerdos, como por ejemplo, canjeando seguridad por mantenimiento», dice, con sencillez.
Evidentemente, tanto esmero dio sus frutos: «Logramos que un terreno de casi dos hectáreas nos fuera cedido por la Municipalidad», manifiesta el vecinalista, estableciendo que el acompañamiento del gobierno local, con intervenciones como la limpieza y el mantenimiento del lote y la provisión de maquinaria, estuvo desde el comienzo del sueño: «Para decirlo sin vueltas, Raimundo fue el único que creyó en mi proyecto. ‘Enrique, dale para adelante’, me dijo«, reconoce y agradece Chierici.
De la nada al club de fútbol
«Yo conocía a un grupo de gente que quería fundar un club pero que lo único que tenía era la intención», rememora Enrique el momento en que hubo que decidir qué hacer con el predio en cuestión. «Les dimos una mano en todo; incluso, en la parte legal, y hoy tienen personería jurídica, cuenta bancaria, más de 60 jugadoras y competencia», completa.
Hay otra entidad (un nuevo-viejo club), que va por el mismo camino: es el Nuevo Club AFI (Agrupación de Fútbol Infantil). AFI compitió hasta hace no demasiado tiempo en la Liga Sanlorencina y su cancha era la que hoy pertenece a Combate de San Lorenzo. «Sus papeles están algo atrasados», informa Chierici, sabedor, evidentemente, de que los tiempos suelen no admitir que el reloj se adelante.
«Un granito de arena»
«El nuestro es un trabajo en conjunto, un granito de arena, para que las instituciones intermedias no se quiebren y puedan seguir adelante. Son las más afectadas por la falta de recursos. por ‘manoseo’ y por un montón de otras cosas, lo que hace que la gente se canse. el club o la vecinal se abandonen y los chicos queden en la calle. Hay que ayudar a esas instituciones a formarse, crecer y trabajar, para que los chicos tengan donde desarrollar su propósito«, concluye Enrique.