
20 días atrás, en Rosario, se llevó a cabo el Juego de las Estrellas de la Federación Santafesina de Gimnasia, destinado a los niveles «escuela» de este deporte, y en el que estaban obligadas a participar todas las instituciones afiliadas a la entidad provincial. Al contrario de lo que sucede con otros deportes, en los que un Juego de las Estrellas consiste en presentar a valores destacados según el ámbito, aquí se trataba de premiar con estrellas doradas cada intervención que tuviera una calificación – de parte del jurado – de 9 puntos o más.
Así fue que las nenas de los niveles E4 y E5 del club de San Lorenzo reunieron, en el predio de la exSociedad Rural de Rosario, 11 de esas estrellas, alcanzando también el premio por obtener la mayor suma de premios. Aunque se trató de una competencia amistosa, ¿cómo no reconocer el éxito y la alegría de las gimnastas, sus familias y sus profes?
El reto de perfeccionar habilidades dotando de salud al cuerpo
Platón, Aristóteles y Homero promocionaron a voz en cuello las cualidades de la gimnasia. Creían que la simetría entre la mente y el cuerpo sólo era posible cuando la actividad intelectual iba unida al ejercicio físico. Y cuando uno se pone a observar un entrenamiento, esa continuidad de movimientos corporales simultáneos y a velocidad, no puede menos que preguntarse: ¿De qué están hechas estas personas? ¿Cuál es su búsqueda, consciente o inconsciente?
«En Red Star intentamos abarcar todo, comenzando por la formación de las habilidades motoras y la especialización temprana», explica Pilar Di Paolo, una de las seis profesoras del área que dirige, desde hace 32 años, Carina Bozzini. «El Juego estuvo buenísimo; tuvo un rasgo más amistoso, con más dinamismo y alegría que una competición federada, donde todo es tan serio, pero igual fue grande el mérito», describió.
Entre 125 y 150 chicas practican gimnasia en Rede, desde los 3 años de edad – cuando ingresan a Escuelita – hasta mayores, y repartidas en niveles en las que se agrupan cada dos años de edad. Fuerza, movilidad, flexibilidad, potencia y coordinación; un set que parece estar destinado nada más que a seres hechos con un material del que la Naturaleza provee sólo ocasionalmente. Pero no: «Todos podemos hacer gimnasia», asegura Pilar; «más aún, en nuestro gimnasio, que es reconocido como el mejor de la zona. Por ejemplo, es el único que tiene el pozo de caída», agrega.
Disciplina, perseverancia… y la cualidad humana de integrar a todos
Hecha la aclaración de que cualquiera puede, hay que ir a los hechos. «Somos reconocidas por nuestro nivel de competencia. Buscamos clasificar a torneos regionales y nacionales; hemos llegado a muchos torneos provinciales, donde se compite por el club, pero luego, ya se defiende deportivamente a la provincia», señala con satisfacción la profe.
«Tenemos 30 chicas federadas, alcanzando hasta nivel 7, lo que es muy bueno si se tiene en cuenta que el nivel 10 (máximo) es Selección Nacional», promueve Pilar. «El objetivo es buscar tener más chicas, más competencia, más nivel». reconoce, pero por experiencia y preparación sabe que eso no es todo; no puede serlo. Por eso: «A nadie se le cierra la puerta en Red Star. Todo el mundo está invitado; no importa su peso, su forma física, su condición. Aquí es muy humano todo«.
